Mes de la Diversidad
Aporte del Lic. Psic. Paribanú Freitas – Representante CPU ante IPsyNet*
Informe de Naciones Unidas sobre terapias de conversión.
“Hasta los ’70, la casi totalidad de escritos sobre psicoterapia con minorías sexuales asumían la homosexualidad como patología. De acuerdo a ello, el tratamiento estaba dirigido a curar a los pacientes o clientes de esa condición, orientándolos hacia la heterosexualidad”
(Ritter, K. & Temdrup, A. (2002). Handbook of Affirmative Psychotherapy with Lesbians and Gay Men. ilford Press. New York)
Esta frase de Anthony Terndrup y Kathleen Ritter, por fuerte que resulte, es parte de un estudio bibliográfico exhaustivo que muestra una realidad que, incluso hoy, tenemos que cuestionarnos.
A nivel de Latinoamérica encontramos al día de hoy publicaciones de hasta 2018 que se preguntan los cómo y los por qué una persona “deviene” homosexual o transgénero. Hecho que, en el fondo, manifiesta una representación patológica del ser gay, lesbiana, bisexual o trans.
Asimismo, la teoría freudiana de la bisexualidad constitutiva, de escasa evidencia empírica al día de hoy, sigue recorriendo los pasillos de nuestras conversaciones.
Todos estos elementos, con énfasis en los problemas del “origen” de las homosexualidades y las identidades trans, son la base fértil sobre la cual crecen las ideas de modificar la orientación sexual o la identidad de género de las personas. Muchas veces enmarcadas en lo que se denomina “terapias de conversión”; dispositivos en los que prácticas profesionales y discursos de la psicología aún persisten.
En este sentido, en el pasado mes de julio, Víctor Madrigal-Borloz, experto independiente en protección contra la violencia y la discriminación por motivos de orientación sexual e identidad de género, elevó un informe sobre “Terapias de conversión” al Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas. Compartimos con ustedes, en este “Mes de la Diversidad”, la exposición pública que realizó (en español) y en la cual se da cuenta de los terribles perjuicios que tales práctica suponen a la salud mental de las personas LGBTI+ .
Sin duda alguna, y de manera activa, este deberá ser un punto en la agenda de la CPU para 2021, en la medida que — tal como lo reporta el informe — dichas prácticas constituyen “trato cruel, inhumano o degradante”.
Enlace a la presentación en video: https://tinyurl.com/y63pwkzw
Enlace al informe escrito: https://tinyurl.com/yxhsgyrf
Conocé más en https://www.apa.org/ipsynet
